LA DISLEXIA

¿QUÉ ES LA DISLEXIA?

Cuando hablamos de dislexia nos estamos refiriendo a un síndrome o conjunto de causas determinado, que se manifiesta como una dificultad para la distinción y memorización de letras o grupo de letras, falta de orden y ritmo de colocación, mala estructuración de frases, y demás características en cuanto a la lectura y escritura.

TRASTORNOS QUE FRECUENTEMENTE CAUSAN DISLEXIA

• Mala lateralización. La lateralidad es el proceso mediante el cual el niño va desarrollando la dominancia de un lado de su cuerpo sobre otro. Nos estamos refiriendo a ojos, oído, manos y pies. Cuando predomina el lado derecho, es un sujeto diestro, y si predomina el lado izquierdo, sería un sujeto zurdo. Los niños que presentan alguna alteración en la evolución de su lateralidad, suelen llevar asociados trastornos en la organización de la visión del espacio y del lenguaje que viene a construir el eje de la problemática del disléxico. El mayor número de casos disléxicos se da en los niños que no tienen un predominio lateral definido.

• Alteraciones de la psicomotricidad. Hablamos de inmadurez psico-motriz o torpeza general de movimientos. Es muy frecuente que los niños disléxicos presenten alguna alteración en su psicomotricidad. estas anomalías no se dan aisladas, si no que acompañan otros trastornos específicos (falta de ritmo, falta de equilibrio, conocimiento deficiente del esquema corporal, etc.)

CARACTERÍSTICAS DEL NIÑO DISLÉXICO

• Falta de atención
• Desinterés por el estudio
• Inadaptación personal

ACTIVIDADES PARA MEJORAR LA DISLEXIA

Las actividades propuestas para trabajar con niños disléxicos en edad escolar está centrado en el área del lenguaje y la inmadurez perceptiva y manual; y abarcan los siguientes aspectos:

• Ejercicios de actividad mental. Atención y memoria, organizar y ordenar elementos, observar y distinguir objetos.
• Ejercicios perceptivos y manuales. Reconocer y agrupar objetos según color, tamaño y forma.
• Ejercicios para la adquisición del conocimiento del propio cuerpo.
• Ejercicios de equilibrio estático y dinámico.
• Ejercicios espaciales. 
• Ejercicios de lenguaje. Nombrar y definir objetos, dibujos, cuentos.
• Ejercicios de lectura y preescritura.

Todos estos ejercicios deben ir aumentando su complejidad en función de la edad del niño, y estimular y adquirir aquellos aprendizajes en donde se haya quedado estancado.